Tras una gran demostración de manejo y una estupenda remontada, de la decimosexta a la octava posición, el mexicano Sergio Pérez chocó en la última vuelta del GP de Austria, producto de una falla mecánica (frenos), lo que lo excluyó de los puntos hoy en el Red Bull Ring.
Pero vaya que el piloto del Sahara Force India y sello Claro-Telmex-Telcel-Infinitum dejó patente su gran momento por el que pasa, quedándose a nada de hacer la hombrada hoy, aunque la veleidosa fortuna le ha jugado una mala pasada.
Pero nos quedamos con los grandes momentos del mexicano de hoy en el Gran Premio de Austria, novena fecha del Campeonato del Mundo de F1 2016, cuando desde la misma primera vuelta ganaba cinco posiciones.
Luego un sensacional doble rebase a Fernando Alonso y Jolyon Palmer, cuando se negociaba el giro 32 y posterior al reinicio de competencia luego de la entrada de Safety Car tras el reventón de neumático y choque de Sebastian Vettel.
Previo a esto Pérez rodaba decimocuarto, y con este doble rebase, más el aplicado a Kevin Magnussen metros adelante, lo colocaban undécimo, detrás de Felipe Massa.
Sin embargo sería hasta el giro 45 cuando se colocaba P10, en la 52 P9, en la 57 P8, buscando a Romain Grosjean por la P7, cuando el francés traía una penalización de cinco segundos por exceder el límite de velocidad de zona de pits.
Pero llegaría la dramática última vuelta, 71, en la que Nico Rosberg chocaba con Lewis Hamilton y Checo se iba derecho en la curva 3, pues al pisar el pedal de los frenos éstos no funcionaron, lo que le imposibilitó terminar en zona de puntos, ubicándosele finalmente en el puesto 17.
"Hay que quedarnos con lo positivo, creo que fue una gran carrera, y con los pocos kilómetros que tuve durante todo el fin de semana, la verdad estoy contento con mi trabajo. Una pena porque quería mantener el gran ritmo de llegar de forma consecutivo a los puntos, pero al final no se pudo, pero (estoy) contento y orgulloso con el trabajo que hicimos como equipo”, manifestó Checo Pérez.